Redacción.- Durante la sesión ordinaria, en el apartado de la efeméride con motivo de los Acuerdos de San Andrés Larráinzar, el diputado Francisco Amadeo Espinosa Ramos (PT) consideró de suma importancia recordar este acontecimiento, derivado del levantamiento armado en Chiapas, en 1994, debido a la situación de tremenda marginación y pobreza en la que se encontraban los pueblos originarios de la entidad y, prácticamente, de todo el país.
Al tomar la palabra, el legislador señaló que las políticas neoliberales soslayaron la precariedad económica de las comunidades indígenas, que fueron invisibilizadas por casi cinco siglos y saqueados sus recursos, primero, por los colonizadores españoles y luego por los capitalistas nacionales.
“En esa época la Cámara de Diputados coadyuvó en la solución del conflicto, aprobando la Ley de Concordia y Pacificación como instrumento legal. Bajo esa premisa, el diálogo entre el Ejército Zapatista de Liberación Nacional y el Estado mexicano de ese entonces, el 16 de febrero de 1996 firmaron los Acuerdos de San Andrés Larráinzar que, con posterioridad, fueron incumplidos por el gobierno federal priista”, detalló en un comunicado.
El congresista por el estado de Chiapas recalcó que, a 28 años de los acuerdos, el gobierno de la Cuarta Transformación, encabezado por el presidente Andrés Manuel López Obrador ha presentado un importante paquete de reformas al artículo segundo constitucional, que da respuesta a la justa exigencia de los pueblos originarios, respetando su forma de vida y de organización interna.
Ahondó en que, dichas iniciativas, destacan la obligación de la autoridad para llevar a cabo consultas públicas, para que pueblos originarios expresen sus puntos de vista sobre lo que se pretenda realizar en sus territorios, se reconoce constitucionalmente a la medicina tradicional como alternativa a los tratamientos alópatas, así como el reconocimiento a parteras y actividad que desarrollen.
“En síntesis, es una iniciativa que pretende, no sólo el reconocimiento de los derechos de los pueblos originarios y afrodescendientes, sino su incorporación al desarrollo nacional y la redistribución de la riqueza nacional”.
