Hay una crisis política con la pérdida de credibilidad del gobierno: PRD
(Especial) De acuerdo con la Secretaria General del Partido de la Revolución Democrática, Adriana Díaz Contreras, la iniciativa preferencial que el Presidente de la República envío a la Cámara de Diputados para reformar la Ley de la Industria Eléctrica exhibe una tremenda pérdida de confianza y credibilidad del gobierno federal.
En primer lugar, señaló la líder opositora, Andrés Manuel López Obrador rompió su promesa de esperar a la siguiente legislatura para tratar los temas relacionados con la reforma energética aprobada durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, con lo que había calmado las inquietudes de los inversionistas del sector energético.
“La ruptura de esa promesa se explica porque el líder de Morena no tiene la seguridad de mantener sus mayorías en la Cámara de Diputados en la elección del próximo domingo 6 de junio”, agregó Díaz Contreras.
De acuerdo con la Secretaria General del PRD, a cuatro meses de las próximas elecciones, lo único seguro que tiene el Presidente es su actual mayoría legislativa y, con esta decisión lo que se advierte es una pérdida de confianza en su partido y en sus satélites PT y PVEM, que cada día suman nuevos episodios de conflictos internos; pero también, señaló Díaz Contreras, es claro que hay un temor al fortalecimiento de la alianza del PRD, PRI y PAN, con lo que perdería su mayoría legislativa y con ella su soberbia capacidad de imponer leyes a su antojo.
“Los defensores de la iniciativa presidencial juran y perjuran que no existe ninguna intención de cancelar contratos, acción que se ha querido imponer desde la Secretaría de Energía, y que el poder judicial ha rechazado por inconstitucional. Pero nadie cree que las intenciones presidenciales sean para que haya piso parejo en la competencia por el mercado de la electricidad”, enfatizó Díaz Contreras.
Como nadie cree en las intenciones presidenciales, también se advierte una pérdida de credibilidad entre los inversionistas y organizaciones que defienden las fuentes de energía limpias y más baratas, añadió la Secretaria General.
Por eso, en contra de la iniciativa se han pronunciado organizaciones empresariales nacionales y extranjeras quienes temen que el gobierno de López Obrador inicie un proceso de desmantelamiento de los contratos con los cuales la iniciativa privada controla un tercio de la producción de electricidad en México.
Finalmente, en su carácter de Secretaría General del PRD, Adriana Díaz consideró que tanto la falta de confianza en sus aliados, como la pérdida de credibilidad presidencial con el sector privado, son síntomas de una real crisis política en la cúpula gobernante. Y podría ser el preámbulo de una derrota legislativa desde el poder judicial.
Por lo tanto, la única salida democrática y en favor del pueblo de México es que la iniciativa de reformas a la ley de la industria eléctrica se discuta ampliamente en todos los niveles sociales y, por supuesto, en un parlamento abierto y que esa iniciativa se modifique de acuerdo con las mejores propuestas que los especialistas, los trabajadores, los empresarios y el gobierno hagan para fortalecer a la industria eléctrica nacional, a la CFE, y a la competencia justa en la producción y distribución de energía limpia y barata.